La portada del Daily Mail al día siguiente de las explosiones de Boston hizo enrojecer muchos periodistas, algunos del propio diario. Este medio de Nueva York eligió para publicar como imagen destacada (entre las muchas que podía seleccionar), esta fotografía, tomada por un fotógrafo de The Boston Globe, en la que figura una mujer y, al fondo, otra, herida en tierra que está siendo atendida, alrededor de un gran rastro de sangre:
El periodista Charles Apple, editor de Orange County Register, fue quien en su blog explicó que el diario había retocado la fotografía, escondiendo la herida que tenía en la pierna una de las personas que salían en la imagen. Su denuncia fue recogida por otros medios, y apareció incluso en el portal de Yahoo news. Pronto buena parte de la prensa estadounidense rechazó la actuación del medio.
La decisión de sacar en portada esta fotografía retocada no salió de la propia redacción sino de la dirección del medio, vulnerando así los principios básicos de la profesión periodística. La decisión sobre qué imágenes publicar o no es un problema con el que se encuentran los medios a la hora de informar sobre sucesos trágicos.
Otros medios estadounidenses, en cambio, como el Newark Star Ledger publicaron la fotografía pero sin la evidente manipulación, que se puede ver a continuación:
Detalle de la foto de Daily Mail
Detalle de la foto de Newark Star Ledger
El diario Capital New York señala que el código de ética de la Asociación Nacional de Fotógrafos de Prensa americano, destaca que “se tiene que mantener la integridad del contenido y el contexto de las imágenes fotográficas” y que “no se pueden manipular imágenes (…) de cualquier forma que pueda inducir a error por parte de los espectadores o tergiversar los sujetos“.
En el caso de Cataluña, nuestro Código Deontológico de la profesión periodística en Cataluñatambién recoge en su anexo 1 Sobre manipulación de imágenes, que en fotoperiodismo no están permitidas manipulaciones que supongan alteración de la información visual grabada originalmente por el objetivo de la cámara y que recoge el soporte, es decir, añadir, eliminar, desplazar o modificar cualquier elemento de la imagen original.
En este caso, sería aplicable este anexo 1 del Código Deontológico. Hay muchas maneras de mostrar una tragedia pero, en todo caso, no es ético hacer una manipulación de una imagen, aunque sea para sacar detalles que puedan herir la sensibilidad de los lectores. Si el medio considera que esta fotografía es demasiado desagradable, debería haber elegido otra para describir unos hechos tan trágicos como los de la maratón de Boston.
